La Comunidad ha finalizado la instalación de las mallas que refuerzan la seguridad de los usuarios y estabilizan cuatro taludes de la carretera que une los municipios de Abarán y Blanca (RM-514) que se vieron afectados por las lluvias torrenciales provocadas por la dana de septiembre de 2019. El director general de Carreteras, José Antonio Fernández Lladó, visitó hoy la obra que acaba de concluir y que beneficiará a los más de 1.000 conductores que diariamente circulan por esta vía regional.
“Se ha instalado malla cortina antierosión y colocado bulones individuales que sujetan rocas de alguna zona concreta”, explicó José Antonio Fernández. Indicó que se ha actuado en 3.700 metros cuadrados, que es la superficie total de estos cuatro taludes, donde se han colocado 231 metros de micropilotes en bulones de tres metros de longitud.