Esta obra, con un simbolismo complejo, se ha inspirado en los troncos de las palmeras cortadas debido a la invasión del picudo y evoca el vergel que existía en el Parque Municipal hasta los años 70.

Ciudades como Milán, Copenhague, Jacksonville, Lisboa, Berlín Kiev, Barcelona, Nueva Delhi, Honolulú, Las Vegas o Estambul cuentan con alguna de sus intervenciones,

El artista urbano de ámbito internacional Gonzalo Borondo ha inaugurado, junto al alcalde de Blanca, Pedro Luis Molina, un mural en el Parque Municipal destinado a dar la bienvenida a los visitantes que entran a la localidad atravesando el puente, desde el corazón del Valle de Ricote.

Esta iniciativa, promovida por el Ayuntamiento de Blanca a través de la Concejalía de Cultura, supone la culminación del ciclo de Gonzalo Borondo en la ciudad, un ciclo que inició en el año 2013 con su mural ubicado en los Huertos del Conde, en plena Gran Vía. La obra de este artista está llena de detalles y trabaja las perspectivas y ángulos con una maestría única, que la llena de magia, contribuyendo a situar a Blanca como uno de los lugares de referencia nacional e internacional en cuanto al Arte Urbano.

La obra que Gonzalo Borondo ha creado en el Parque Municipal de Blanca está llena de un simbolismo complejo como la propia condición humana. Se ha inspirado en los troncos de las palmeras cortadas debido a la invasión del picudo, donde hacen de columnas custodias del Parque. En su obra crea un templo donde imagina que alberga un jardín de palmeras en su interior evocando el vergel que existía en el Parque hasta los años 70 del siglo pasado. (Ver imagen del archivo de Angel Ríos)

Este mural tiene un impacto visual físico, el usuario tiene que detenerse para observar los detalles que hay dentro de él. En la era del consumo rápido de la imagen, el artista trabaja de forma opuesta, no facilitando el agotamiento inmediato de la imagen y para eso crea diferentes texturas, técnicas y símbolos que pertenecen a la historia de Blanca y su cultura. Invitando al visitante a reflexionar sobre lo que está observando, ofreciendo varias interpretaciones de la imagen creada. Para la realización de esta obra Gonzalo Borondo ha contado con la colaboración del artista Pablo Herguedas.

Trayectoria artística

Gonzalo Borondo nació en Valladolid en 1989 y al poco tiempo se trasladó a Segovia, donde creció y vivió hasta el año 2003, cuando se marchó a Madrid, donde conectó con el graffiti, el activismo y los grupos de arte alternativo.

En 2007 comenzó a pintar en el espacio público, primero con un objetivo político y, más tarde, con un contenido más poético. Y en 2010 empezó a mostrar interés por establecer diálogos afectivos y disruptivos en espacios muy dispares. A partir del 2012 realizó exposiciones individuales en Roma, Madrid, París o Londres, claves para su carrera. Desde 2017 está centrado en la realización de proyectos fruto del diálogo con el contexto del lugar intervenido. Sus obras nacen del diálogo con el contexto que enfrenta; del encuentro con memorias de lugares y personas. Cuenta con intervenciones en todo el mundo en ciudades como: Milán, Copenhague, Jacksonville, Lisboa, Berlín Kiev, Barcelona, Nueva Delhi, Honolulú, Las Vegas o Estambul.